La postura en el trabajo es, hoy en día, una de las limitaciones más molestas a las que el cuerpo está sometido diariamente: la pantalla, el teclado, el ratón, la silla de oficina para los utilizadores del ordenador, movimientos repetitivos, transportar cargas pesadas, permanecer de pie… Estás posturas modifican poco a poco el sistema muscular y puede acarrear la pérdida de movilidad articular o dolores.
La osteopatía permite tratar no solamente un dolor ya presente (en el cuello, hombros, codo, muñeca…), sino también prevenir la aparición de otros dolores debidos a la postura en el trabajo.
El osteópata puede también aconsejarle cómo cambiar su postura en el trabajo para mejorarla e impedir que aparezcan los dolores.